La Algarroba es una vaina (o legumbre) comestible, de color castaño oscuro, de 10 a 22cm de longitud, 2 o 3cm de ancho y 1cm de grueso. Normalmente es alargada, con forma curvada o retorcida y coriácea, la pulpa es el 90% del fruto y las semillas el 10%. Tiene unas gruesas paredes, la pulpa es carnosa, de textura harinosa, sabor dulce y rodea las semillas (garrofines).
 
Esta vaina permanece verde cuando es joven y en el mes de julio su color cambia a chocolate oscuro brillante, alcanzando su punto más alto de madurez en el mes de Septiembre. Las Algarrobas salen aisladas o agrupadas (como en racimos). Su pulpa es muy rica en azúcares, baja en proteínas y en grasas, rica en fibras y minerales: fósforo, calcio, potasio, magnesio y sodio.
 
Los garrofines son las semillas de la Algarroba, tienen forma ovalada, aplanada de unos 9 a 10mm de largo y 6 a 8mm de ancho, de color rojizo oscuro-marrón casi negro, brillantes y lisas. Hay unos 6 o 12 Garrofines en cada garrofa, según la variedad. Son muy duros y representan casi el 10% del peso del fruto completo, son muy ricos en galactomananas, polisacáridos y en proteínas de alta calidad.
 
Algarrobas